Dra. Laura Cárdenas Puiggros Médica Oncóloga. Hospital Universitari Dr. Josep Treueta Girona
El cáncer de cérvix y el cáncer de cuello uterino son términos que se utilizan indistintamente para referirse a la misma enfermedad, que es un tipo de cáncer que se desarrolla en el cuello uterino, la parte inferior del útero que conecta con la vagina.
¿Qué es el cáncer de cuello uterino?
El cáncer de cuello uterino comienza en las células del epitelio que recubren el cuello uterino. Este tipo de cáncer es principalmente causado por una infección persistente del virus del papiloma humano (VPH), un virus transmitido sexualmente. Hay muchos tipos de VPH, pero solo algunos de ellos causan cáncer cervical.
Características
El cáncer de cuello uterino puede no presentar síntomas en sus etapas iniciales. A medida que progresa, puede manifestar síntomas como sangrado vaginal anormal, secreción vaginal inusual y dolor durante las relaciones sexuales. Si el cáncer está avanzado, puede causar dolor en la pelvis o durante la micción, así como hinchazón de las piernas.
Incidencia
La incidencia del cáncer cervical varía considerablemente entre diferentes regiones del mundo, siendo mucho más común en lugares con acceso limitado a programas de cribado (detección) efectivos. Según la Organización Mundial de la Salud, el cáncer de cuello uterino es el cuarto cáncer más común en mujeres a nivel mundial y uno de los más prevenibles.
Prevención
La prevención del cáncer de cuello uterino incluye varias estrategias:
1. Vacunación contra el VPH: Las vacunas están disponibles y son efectivas para prevenir las infecciones por los tipos de VPH que más comúnmente causan cáncer cervical. Se recomienda la vacunación para niñas y niños antes de que sean sexualmente activos.
2. Exámenes de detección: Pruebas como la citología (Papanicolaou) y la prueba del VPH pueden detectar cambios precancerosos en el cuello uterino antes de que se conviertan en cáncer. Estos exámenes permiten la detección temprana y el tratamiento oportuno, lo cual es crucial para mejorar las tasas de supervivencia.
3. Prácticas sexuales seguras: El uso de preservativos durante las relaciones sexuales puede reducir el riesgo de contraer el VPH.
4. Educación y concienciación: Informar a las personas sobre el cáncer de cuello uterino y sus factores de riesgo es fundamental para fomentar la participación en programas de vacunación y detección.
La implementación efectiva de estas estrategias de prevención ha demostrado disminuir significativamente la incidencia de cáncer cervical en varias partes del mundo, destacando la importancia de mantener y expandir tales programas para continuar luchando contra esta enfermedad.