Es la primera pregunta que se nos viene a la cabeza cuando nos diagnostican cáncer de mama, incluso en ocasiones no viene a nuestra cabeza como pregunta, sino como afirmación.
Cuando le formulamos esta pregunta a la psicooncóloga la Dra. Concha León, su respuesta es " muy probablemente te morirás algún día, pero no tiene porqué ser hoy, ni tampoco tiene porque ser por cáncer. Eso es algo que no sabemos".
Queremos deciros que se ha evolucionado muchísimo en la superación del cáncer de mama con un índice de supervivencia muy elevado, aunque no será suficiente hasta que lleguemos al 100%. Podríamos ofrecer datos de supervivencia según tipo de tumor, a 5 o 10 años, etc., pero eso son estadísticas, y las estadísticas son para los profesionales, porque quién nos asegura que estaremos en un lado u otro de esos porcentajes. Por lo tanto, sigámonos centrándonos en la superación del cáncer y no en sus datos.
¿Te vas a morir del cáncer de mama que te han diagnósticado? Nadie puede responderte a esa pregunta con certeza, pero sí hay algo que podemos decirte, esa pregunta te va a acompañar, sobre todo, los primeros días o semanas. Es la pregunta que alimenta tu miedo, es la pregunta que no te dejará dormir, te hará llorar. Pero también es la primera pregunta que tienes que superar. Toma el tiempo que necesites y busca ayuda en tu equipo médico, en tu entorno, es la pregunta que tienes que hacer cada día un poco más pequeña. A medida que empieces el tratamiento y vayas avanzando no centres tu atención en esa pregunta, hazlo en aquellas cosas que te den luz, esperanza, aquellas cosas que vas superando o mejorando.
Si bien el tratamiento es básico y fundamental para la evolución de tu enfermedad, tu estado anímico, es fundamental para tu vida.
Afrontando la Incertidumbre: Reflexiones sobre el Diagnóstico de Cáncer de Mama.
El impacto de recibir un diagnóstico de cáncer de mama es profundo y abrumador. Entre las muchas preguntas y preocupaciones que surgen, una de las más inquietantes y persistentes es la incertidumbre sobre el futuro y la posibilidad de la muerte. La idea de la propia mortalidad puede ser aterradora y desgarradora, pero es importante abordarla con calma y comprensión.
En el momento del diagnóstico, es natural que surjan preguntas sobre el pronóstico y las posibilidades de supervivencia. La incertidumbre sobre el curso de la enfermedad y la eficacia del tratamiento puede generar ansiedad y miedo. La idea de la muerte puede convertirse en una sombra constante, oscureciendo incluso los momentos de esperanza y optimismo.
Sin embargo, es fundamental reconocer que el cáncer de mama no es necesariamente una sentencia de muerte. Con los avances en la detección temprana, el tratamiento y la atención médica, muchas personas logran superar esta enfermedad y llevar vidas plenas y significativas. El pronóstico y la esperanza de vida pueden variar según el estadio del cáncer, la respuesta al tratamiento y otros factores individuales, pero es importante recordar que siempre existe la posibilidad de curación y recuperación.
Afrontar la posibilidad de la muerte puede ser un proceso emocionalmente desafiante y complejo. Es natural experimentar una gama de emociones, incluida la tristeza, la ira, el miedo y la negación. Estos sentimientos pueden ser abrumadores en momentos, pero es importante permitirse sentirlos y procesarlos de manera saludable. Buscar apoyo emocional, ya sea a través de amigos, familiares, grupos de apoyo o profesionales de la salud mental, puede ser invaluable en este proceso.
Es importante recordar que la preocupación por la muerte es parte del viaje del cáncer, pero no define ni determina el resultado final. Centrarse en el presente, en el cuidado personal y en las decisiones de tratamiento informadas puede ayudar a reducir la ansiedad y encontrar un sentido de control en una situación aparentemente abrumadora.
Además, es esencial mantener una comunicación abierta y honesta con el equipo médico para comprender completamente el diagnóstico, el pronóstico y las opciones de tratamiento disponibles. Obtener información precisa y confiable puede ayudar a disipar los temores y aclarar las opciones disponibles para el manejo del cáncer de mama.
En conclusión, recibir un diagnóstico de cáncer de mama y enfrentar la posibilidad de la muerte es un desafío emocional y mental considerable. Sin embargo, es importante recordar que el cáncer de mama no es necesariamente una sentencia de muerte y que existen muchas razones para mantener la esperanza y el optimismo. Con apoyo emocional, información precisa y cuidado médico adecuado, es posible afrontar esta experiencia con coraje, determinación y fortaleza.