Quimioterapia neoadyuvante

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Dr. Álvaro Rodríguez Lescure Jefe del servicio de Oncología del Hospital General Universitario de Elche

La quimioterapia neoadyuvante es un tratamiento utilizado en pacientes con cáncer de mama antes de someterse a la cirugía. Su objetivo principal es reducir el tamaño del tumor y, en algunos casos, eliminar las células cancerosas en los ganglios linfáticos cercanos antes de la extirpación quirúrgica. Este enfoque terapéutico se aplica generalmente a pacientes con cáncer de mama en etapas tempranas o localmente avanzadas, donde el tumor es grande o hay evidencia de que se ha diseminado a los ganglios linfáticos cercanos.

La quimioterapia neoadyuvante tiene varios objetivos importantes:

1. Reducción del Tamaño del Tumor: Al administrar la quimioterapia antes de la cirugía, se busca reducir el tamaño del tumor. Esto puede facilitar una cirugía menos invasiva y conservadora de la mama, y aumentar las posibilidades de lograr un resultado estético satisfactorio.

2. Eliminación de Células Cancerosas en Ganglios Linfáticos: Además de reducir el tamaño del tumor, la quimioterapia neoadyuvante puede ayudar a destruir las células cancerosas que se han diseminado a los ganglios linfáticos cercanos. Esto puede ser beneficioso para reducir el riesgo de recurrencia del cáncer y mejorar los resultados a largo plazo.

3. Evaluación de la Respuesta al Tratamiento: La quimioterapia neoadyuvante también permite evaluar la respuesta del tumor al tratamiento antes de la cirugía. Esto puede ayudar a los médicos a determinar la efectividad de la quimioterapia y ajustar el plan de tratamiento en consecuencia.

Los fármacos utilizados en la quimioterapia neoadyuvante pueden variar según el régimen de tratamiento específico prescrito por el médico. Algunos de los medicamentos comúnmente utilizados incluyen:

- Doxorrubicina (Adriamicina)
- Ciclofosfamida (Cytoxan)
- Paclitaxel (Taxol)
- Docetaxel (Taxotere)
- Fluorouracilo (5-FU)
- Carboplatino
- Trastuzumab (Herceptin), para cánceres de mama HER2 positivos

Los efectos secundarios de la quimioterapia neoadyuvante pueden variar según los medicamentos utilizados y la respuesta individual del paciente al tratamiento. Algunos efectos secundarios comunes incluyen náuseas, vómitos, fatiga, pérdida de cabello, supresión del sistema inmunológico y riesgo de infecciones.

La quimioterapia neoadyuvante se administra típicamente mediante infusión intravenosa en una clínica u hospital especializado en cáncer. Durante una sesión de quimioterapia neoadyuvante, se administra una solución que contiene medicamentos de quimioterapia directamente en una vena del brazo o de la mano. El número de sesiones y la duración del tratamiento pueden variar según el plan de tratamiento específico de cada paciente, que será determinado por el equipo médico en función de varios factores, incluyendo la respuesta al tratamiento y los efectos secundarios experimentados. Es importante que los pacientes se comuniquen abiertamente con su equipo médico sobre cualquier preocupación o efecto secundario que puedan experimentar durante el tratamiento.